domingo, 21 de febrero de 2016

Más Maldito Karma de David Safier o un libro de uno de mis escritores favoritos (4)

La gente que me conoce sabe que tengo dos grandes debilidades literarias. Las sagas de Harry Potter de JK Rowling y Canción de hielo y fuego de George RR Martin, pero no puedo decir que sean mis escritores favoritos pues del resto de su obra no he leído nada. 
Si le preguntas a alguien por mis escritores favoritos seguramente te respondan que son Jane Austen o Marian Keyes. Y si bien es cierto que adoro a estas escritoras, me he leído (y releído) todos sus libros y no me canso de hablar de ellos en realidad ni si quiera los tengo todos (algunos me los han dejado, otros los he descargado en e-pub o los cogí prestados de la biblioteca). El único escritor que tiene el honor de tener todos sus libros en mi estantería es David Safier.
En cuanto vi que había sacado libro nuevo me lancé a la librería más cercana a comprarlo. Lo tenía pendiente desde finales de año e iba a ser una de mis primeras lecturas de 2016. Pero cuando me embarqué en esto del reto de lectura lo reservé para más adelante, cuando el reto me pesase tanto como para plantearme dejarlo a medias, por que los libros de Safier siempre me los he leído de una sentada y podría ayudarme a retomar el reto con más ganas. Pero como soy una agonías no he podido evitar leerlo antes de tiempo y, como viene siendo habitual, me lo he leído del tirón.

Safier, David. Más maldito karma. Seix Barral: Barcelona, 2015.

Empecemos por el argumento: Daisy Becker es joven actriz de poca monta que malvive entregada al alcohol, el sexo sin compromiso, la noche y la comida basura sin importarle nada la gente que hay a su alrededor. Marc Barton es una superestrella de Hollywood caprichoso  que se preocupa más de su perro que de la gente que trabaja con y para él. Las vidas de ambos se cruzan cuando a Daisy le ofrecen un trabajillo en una de las películas de Barton pero la cosa no empieza bien entre los dos y, para colmo de males, acaban muertos en un accidente. Pero lo peor de todo no es que mueran juntos si no que también se reencarnan juntos y, como ambos han acumulado mucho karma del malo, lo hacen como hormigas. Poco a poco, tendrán que ir acumulando buen Karma para escalar en la escala evolutiva y así evitar que el mejor amigo de Daisy y la esposa de Marc acaben juntos gracias a sus respectivas muertes.
El argumento es prácticamente el mismo que el de su primera novela Maldito Karma: una persona que ha llevado una vida reprochable muere, se reencarna en hormiga por su mal karma y ha de acumular buen karma para poder estar con los suyos de nuevo. No se trata de una segunda parte, pues los protagonistas no son los mismos ni tampoco están relacionados, se trata de la misma fórmula con la que Safier saltó a la fama y sigue funcionando a las mil maravillas pues las situaciones a las que se enfrentan los personajes son tan hilarantes que la moraleja de la historia no se hace pedante si no un mal necesario. Además todo está escrito con agilidad, humor y frescura.
A pesar de no ser una segunda parte nos volvemos a encontrar a uno de los personajes recurrentes en las novelas de Safier: Casanova (excepto en 28 días, ya era lo que único que me faltaba, encontrar a Casanova en el gueto de Varsovia!!). Sólo que al morir esta vez, Casanova ha vuelto a descender en la escala evolutiva del Karma y ya no nos encontramos al gato sensual si no que es de nuevo una hormiga. 
Y ahora mi opinión. Safier no engaña a nadie, el libro es Más Maldito Karma, literalmente. . Evidentemente al ser una especie de secuela el factor sorpresa ha desaparecido pero  por la misma razón ya vas sobre terreno seguro y me ha gustado y me he reído mucho.
¿Lo recomiendo? Por supuesto que sí, de hecho recomiendo cualquier libro de David Safier que para algo es uno de mis escritores favoritos!!!

martes, 16 de febrero de 2016

Signatura 400 o un libro sobre libros (23)

Las estanterías de mi casa y mi presupuesto son limitados y, como a pesar de haberlo intentado, no soy muy amante de los libros electrónicos, la semana pasada fui a la biblioteca a por algún libro que pudiera utilizar para mi reto lector. Buscando entre las estanterías leí un título que llamó mi atención: Signatura 400. Y la mayoría de vosotros pensará "¿Y por qué carajo te llamó la atención?". Seguramente si no has estudiado biblioteconomía y documentación o no eres muy asiduo de las bibliotecas este título pasará inadvertido pero como yo cumplo ambas condiciones en seguida me di cuenta que ese título está estrechamente relacionado con los libros y las bibliotecas. Es el código vacío de la Clasificación Decimal Universal (CDU para los amigos) reservado para futuros y nuevos conocimientos. Cogí el libro, leí el resumen de la contraportada y me fui rauda y veloz al mostrador de préstamo. Este sería el libro sobre libros (punto 23).

Divry, Sophie. Signatura 400. Barcelona: Blackie books, 2011.

El resumen argumental es muy sencillo. Una bibliotecaria amargada (por que está amargada perdida, la pobre) encuentra a un usuario que se ha pasado la noche en la biblioteca por accidente y mientras hace tiempo hasta que abran al público ella le suelta un monólogo sobre lo que para ella significa ser bibliotecaria, la literatura y la cultura.

Conforme iba leyendo el libro me iba cabreando o sorprendiendo a partes iguales ya que como la pobre está amargada, despotrica de la profesión y de las bibliotecarias (a mitad del libro sabemos que les tiene un poco de inquina a las bibliotecarias tituladas, ya que ella en realidad es auxiliar). Y sí, yo seré archivera, pero como diplomada en Biblioteconomía y Documentación que soy me he sentido muy aludida y no sólo por mi si no por las muuuuuuchas amigas (y algún amigo) bibliotecarias que tengo. Concretamente, algunas lindezas que suelta sobre esta profesión son:
Clasificar, colocar, no molestar, ésa es toda mi vida.
Para ser bibliotecaria hay que apreciar el concepto de clasificación y ser una persona obediente, SIN INICIATIVA.
Obrera especializada: colocadora de libros.
Incluso hoy, las bibliotecas son una cosa TRISTONA.
La bibliotecaria debe aportar un suplemento de cultura a los lectores [...] A sus simpáticas historias lacrimógenas hay que cortarles la cabeza.
Pero para mi sorpresa, conforme se acerca al final del monólogo y cuando estaba a punto de gritarle "Mujer, si tan amargada estás deja el trabajo!!!!!" la cosa da un giro y admite que todo eso que ha dicho antes no es verdad y que sólo lo ha dicho por frustración en su vida personal. Entonces me reconcilié con el personaje al leer cosas como estas:
Se pueden hacer grandes cosas siendo bibliotecaria.
Ejerzo un oficio valiente, útil, interesante, que exige un sinfín de cualidades.
Que lean lo que quieran, pero que lean.
Una de las cosas que más me ha gustado del libro es todas las referencias a la ciencia bibliotecaria, es decir, a la Biblioteconomía por que, por decirlo de alguna manera, la sangre tira. Algunas cosas que se dicen y que un mortal no entendería son:

  • Compara a Melvil Dewey, el creador de la clasificación decimal de Dewey, con Mendeléyev, el creador de la tabla periódica.
  • El debate profesional entre los que usan la CD Dewey con la Clasificación Decimal Universal.
  • La redacción del primer manual de biblioteconomía por el bibliotecario de la Biblioteca Mazarino, Gabriel Naudé.
  • La gran defensa de la biblioteca pública que hizo Eugène Morel.


La parte en la que habla sobre libros lo hace sobre todo de grandes escritores franceses (ya que la autora es francesa) como Simone de Bouvier, Maupassant o Balzac y de sus obras. Y también menciona una retahíla de títulos que va clasificando y a los que va poniendo signatura. Pero más que sobre libros se habla de literatura y de cultura, de su acceso libre y universal, de la literatura de consumo enfrentada a la literatura "de verdad" (utilizando palabras del personaje).

Pero si de algo habla fundamentalmente el libro es de la angustia, del no saber que vendrá, del miedo a lo desconocido y todo ello simbolizado por la ausencia de la signatura 400 ya que, como dije al principio del post, cuando se pasó de la CD Dewey a la CDU esta clase se dejó en blanco para poder incorporar algún conocimiento futuro.

En definitiva, si no tienes una relación muy estrecha con la biblioteca o con algún/a bibliotecaria/o el libro no te va a decir nada especial. Pero si no, al menos, habrá cosas que te llamen la atención.

Por último, para demostrar que las bibliotecarias son gente mu maja acabo con una foto de mis compañeros de la uni.

 
 
 
 
 
 
 

martes, 9 de febrero de 2016

Tokio Blues o un libro que transcurra en Asia (08)

Cuando estas navidades me regalaron un libro que ya tenía no me lo pensé dos veces y decidí descambiarlo por otro que pudiera incluir en alguno de los ítems de mi reto de lectura. Por eso, en cuanto vi Tokio Blues lo elegí para el punto 08 (libro que transcurra en Asia) y así me lo quitaba de encima porque aunque en la mayoría de los ítems tengo una leve idea de las posibles novelas o autores que leer, en cuanto a los que pasan en Asia y África no se me ocurría nada.

Murakami, Haruki. Tokio Blues: Norwegian wood. Tusquets: Barcelona, 2005.

Hablemos del argumento: la cosa va de triángulos amorosos. Watanabe es un adolescente que marcha a estudiar a la universidad de Tokio. En una punta del triángulo está la traumatizada  novia de su mejor amigo en el instituto y que suicidó a los 17 años, Naoko. En el otro vértice se encuentra la sufridora pero vitalista Midori.

Aunque así a simple vista parezca la típica historia de adolescentes que buscan su camino hacia la madurez (que lo es) no hace falta escarbar demasiado para darse cuenta que hay mucha más chicha de lo que parece pues los tres personajes principales están tarados y cuando digo tarados lo hago literalmente ya que sufren taras mentales en forma de fantasmas del pasado: Naoko está marcada por el suicidio de su novio (y algún que otro trauma más, pero no es cuestión de hacer spoilers a nadie); Watanabe además de sentir la perdida de su mejor amigo siente la responsabilidad de cuidar de Naoko; y Midori pese a su juventud ha tenido que lidiar con la muerte de su madre tras una larga enfermedad (y más cosas, esto sólo es el punto de partida). La novela no se centra tanto en los sentimientos amorosos si no en las emociones en general. Entre estas emociones se encuentra el amor, es cierto, pero también la aceptación de la muerte, el sentimiento de pérdida (física y emocional) de las personas, el deseo sexual, la confusión, la soledad, la búsqueda de la personalidad, la melancolía o el optimismo.

Varias cositas más a comentar de esta novela:

  • Tenía un poco de miedo por que me habían dicho que el autor era muy poético, pero creedme cuando os digo que Murakami utiliza las descripciones y las metáforas de manera que hacen que la historia en vez de detenerse a contemplar la escena avance sin perder nada de ritmo. Y todo esto lo hace de una manera totalmente intimista y exquisita.
  • Los personajes secundarios son totalmente necesarios y cada uno está puesto en la novela para cumplir una función concreta. No sobra ni falta nadie.
  • Este libro pasa en Japón (de ahí que me sirva en el reto) y nos muestra varios aspectos de la cultura japonesa de la época (la historia se ambienta entre 1969 y 1971). Nos hablan de comida tradicional, de los trenes bala (hace 40 años!!!! y nosotros como borregos gracias a RENFE), de los barrios de Tokio, de las montañas de Kioto, del sistema educativo y de las revueltas estudiantiles.
  • En relación con este punto, me llama la atención que los protagonistas consuman tanta cultura occidental, sobre todo literatura y música (no sólo de Beatles).
  • La historia nos la cuenta el propio Watanabe 20 años después, cuando está a punto de cumplir 40 y creo que esto es lo que le da al libro ese toque melancólico pero sin llegar a ser deprimente. A fin de cuentas nos explica recuerdos al borde del olvido a los que ha sobrevivido.
  • La naturalidad con la que el autor habla de temas que suelen ser bastante tabú o escabrosos: el sexo explícito y el suicidio. Respecto al sexo he de admitir mis prejuicios ya que tanto por la época como por lo que nos venden de los orientales (tradición, familia, ...) no pensaba que los personajes practicaran sexo con tanta libertad y, en algunos personajes, hasta con libertinaje. De los suicidios, a veces se lee y se oye en los medios de comunicación que es habitual en los jóvenes nipones. En cualquier caso, la manera de tratar ambos temas es muy natural sin recrearse en el morbo si no más bien como constatación de un hecho: tal persona se ha suicidado, esta otra se masturbó pensando en no se quién y este otro hizo la colada. Simplemente son cosas que pasan.
Hace unos años hicieron la película y no he podido evitar verla. He de reconocer el mérito de intentar plasmar en pantalla todo ese universo de emociones y sensaciones mediante silencios y planos fijos de personas y de paisajes. Creo que la parte referente a la relación con Naoko está bastante bien adaptada mientra que la referida a Midori queda bastante diluida. Además, los secundarios no están tan bien definidos como en el libro cosa que hace que el contexto del protagonista quede incompleto a pesar de la voz en off.

En definitiva, si te has leído el libro la película pasa relativamente bien, si no te has leído el libro mejor no veas la película y si viste la película sin haberte leído la novela hazte un favor y léela por que merece la pena.

PD (pánico pre-talentada modo on): Made mía!! Estamos casi a mediados de febrero y yo aún voy por la segunda reseña!! Ya llevo una semana de retraso con el reto!!!! Pero bueno, el próximo libro ya está empezado y para evitar nuevos tropiezos he escogido un libro cortito para acelerar el proceso.